domingo, 26 de junio de 2011

Mi día, mi descarga.

Quería hacer algo como atravesar la 9 de Julio corriendo o subir hasta la terraza de un edificio muy alto, pero ese tipo de cosas de películas NO me van a pasar NUNCA y sigo esperando que sí.
La pase bien, pensé que no iba a ir nadie y me iba a quedar sola dando vueltas.
Pero al final de todo sentí un vacío, va, EL vacío de siempre, y me llego un mensaje de él y eso me shockeó lo suficiente como para que por un rato no estuviese mal si no desconcertada... ¿qué mierda te importa si yo estaba en San Martín? ¿Y a mí que mierda me importa que estés con tu novia y me hayan visto?
Y no, no los voy a agregar a facebook o al msn otra vez.
O sea, el año pasado juró que te había perdonado, que me pude decir a mí misma que habías cambiado pero no nene, no cambiaste, tenés 18 años y sos un pelotudo, y tu novia POBRE, me caía bien y estuve, estuve pero no le dije nada porque no era mi deber pero ya te sacó la ficha así que no le actúes más con la misma.
Onda, tenés una buena excusa para convencer a alguien de que se quede pero ya pasaron años querido, así que...

Volviendo a mi maravilloso día, cuando iba para la parada quería correr, sentía la necesidad de correr y apuraba el paso (piensen que yo camino de por sí muy rápido)...
En realidad quería verla a ella...

1 comentario: