Nadie puede obligar a una persona a quererte, ni siquiera ella misma puede ya que eso sería una conducta autodestructiva.
Trato de sobrellevar lo mejor posible todo lo que se esta desmoronando en este preciso momento, de no dejarme caer para que el resto no se hunda conmigo ya que en este momento no puedo permitirlo. Trato de ser un pilar para sostener la estructura por más que odie su arquitectura. Trato, siempre trato pero nadie trata por mí. Podrán decirme lo que se les plazca, siempre estaré a favor de la libertad de opinión, pero ya no quiero tomar más nada en cuenta, ya no quiero pensar en positivo sobre mi vida, ya no quiero crear escenas en mi cabeza de situaciones perfectas por creer el "vos te mereces lo mejor", "alguien como vos se merece que lo quieran con el alma", "mereces un altar por todo lo que haces". No merezco, la gente no merece, la gente gana y yo pierdo en todo.
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